- - Todo es tan increíble, no puedo creer que todo
esté, de una vez por todas en su sitio, en el sitio que yo le asigné al empezar
esta historia que ahora parece menos interminable. Después de una barbaridad de
capítulos, ha llegado el de verdad, el importante, el que todo escritor desea
plasmar en el papel, el que todo lector desea saborear con sus ojos y el que
todo personaje desea protagonizar.El maravilloso capítulo clave de la historia,
simplemente aquel lleno de esa palabra tan….impronunciable para mí. El capítulo
en el que las miradas se clavan, pero no miradas de las que duelen, tampoco de
las que matan, son las miradas que dan vida, las miradas que hacen que dentro
de esta larga historia empiece otra nueva con el único objetivo de ser eterna. ‘’Lo
que hacemos en la vida tiene su eco en la eternidad’’. Es ese sencillo momento
en el que más de un sueño se ve cumplido, ese único momento que no se repetirá
jamás, porque es el primero y como el primero no hay ninguno. Es un primer
beso, es el momento en el que el mal desaparece aunque sea por unos segundos,
por unos cuantos párrafos de la historia y se esconde en su cueva, el bien,
como siempre, gana, triunfa, sale por la puerta grande. Es ese momento
indescriptible en el que ella, tan perfecta como lo soñé, tan lista, guapa,
brillante, todos esos adjetivos en mi lista de cosas buenas dentro de mi caja
de sorpresas, todos ellos suyos. El momento de la verdad, en el que la historia
da un verdadero vuelco, es justo ese momento del cuento en el que todo va mal, la guerra está casi perdida, los
esfuerzos son inútiles, y justo en ese preciso momento, aflora la mayor de las
fuerzas jamás conocida, esa fuerza que nunca separa, que une, ese hilo que no
es capaz de cortar la distancia. Fue ese preciso momento en el que tu madre y
yo nos hartamos de todo, de nuestras tonterías, de nuestros fallos, de los
demás y de sus opiniones. Fue el momento en el que pensamos en y por nosotros
mismos, y nos dimos cuenta de que estábamos en una causa perdida, más que
perdida, esa causa no era otra que el bien de aquellos que deseaban nuestro
mal, de esas voces que resonaban en nuestra mente y no dejaban hablar al
corazón, fue ese preciso momento en el que me di cuenta de que era lo mejor de
mi vida, que era todo lo que necesitaba y llevaba buscando en mis innumerables
viajes. Fue en ese momento de locura en el que nos besamos y comenzó nuestra
interminable historia.
- -Papá…
- -Y fue así como todo empezó nuestra historia interminable...
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