''Toc, toc''

Vuelve a temblar todo mi cuerpo, es un pequeño terremoto dentro de mí.

Una sensación demasiado inexplicable…

Han chocado las mayores placas tectónicas existentes dentro de mí.

Es demasiado inexplicable, estoy perdido, más que el fontanero de Titanic, pero espero no tener ese fatal y devastador final.

Es invierno, pero es un invierno demasiado frío esta vez.

No tengo ningunas ganas de levantarme, ni si quiera para mirar el reloj, además creo que está parado, sí, se paró a la vez que mi corazón, que mis ganas de vivir.

Siento un nuevo escalofrío, solo quiero salir a la calle, y lo hago, es una última voluntad.

Obreros y patrones, jefes y empleados, parejas, amigos, familias, todos juntos celebrando esa fiesta llamada Navidad.

Algo blanco cae del cielo, algo un tanto raro, aumenta mi sensación de frío y cuando intento cogerlo entre mis dedos desaparece.

¡Es nieve! Ha llegado, por fin… ¿por fin?

Necesito bajar corriendo, necesito tocarla, sentir el frío en mi piel, quiero comprobarlo.

Pulso el botón y de un empujón abro el portal…

Y el frío me da la mayor hostia jamás contada  y también la más merecida.

Es tal, que me caigo al suelo, no puedo creerlo, no quiero que llegue, le veo llegar, hacia mí viene demasiado deprisa así que cierro la puerta de golpe y me dirijo al ascensor.

Pulso el tres y preparo las llaves, se abre la puerta del ascensor y corro, abro la de mi casa y dejo la llave puesta.

Cada vez hace más frío, pero solo veo las ropas de verano, la calefacción no va.

Mi móvil empieza a sonar, es la…un momento… ¿Danza Kuduro?

No entiendo nada…

Se oyen pasos, creo que está llegando, se aceleran mis pulsaciones, no lo aguanto.

Abro el armario, saco la caja y lleno el vaso de agua.

Es solo un trago, un mísero trago y desaparecerá.

‘’¿De verdad vas a dejarle ganar?’’- dice algo dentro de mi.

Ruido extraño, está tocando la puerta, la está aporreando y cada vez más fuerte.

No puedo, no aguanto, las lágrimas se juntan con las gotas de sudor cuando caen por mi cara. ‘’Quieto…no entrará’’- continua.

-‘’¡ No¡ Es imposible, no puedo evitarlo, si entra, volverá a ganarme y acabará conmigo y si huyo de nuevo, que es a lo único que me he estado dedicando en estos meses, volverá a por mí…Por muy lejos que esté, no dejará de existir, no se olvidará’’- Me grito a mí mismo.

‘’ Tiempo, es tiempo, el tiempo pasa, se olvida, desaparece, tú eres el único que puede conseguir la victoria. ’’- Insiste.

‘’ Estoy acostumbrado a perder’’- pienso

Ha derribado la puerta…

‘’ Lo siento, distorsioné la historia, pero hagamos que todo esto termine como un cuento…’’

 '' Y de un trago...desapareció para siempre''

Los malos estamos hechos para perder...

Good Bye 

Se esfumó...

Beber hasta no distinguir mi propia realidad, fumar hasta que me sangren los pulmones, parecen buenas soluciones.

Cada botella que he vaciado vaso a vaso, se ha esfumado.

Cada calada, el humo que echaba por mi nariz o por la boca, desaparecía.

Es una realidad diferente, demasiado extraña.

Esto es demasiado monótono, merece la pena vivir eternamente en esta situación.

He de confesar que muchas veces me he planteado dejar esto, abandonar, tomármelo como uno de los tropecientos intentos de conseguir algo en esta vida, uno más de todos los fallidos…

No puedo seguir achacando todo a la misma causa.

Pero ha desaparecido, no sé como describirlo, ya nada es como antes.

De poco consuelo me sirven estas inservibles palabras que tecleo en este mismo momento.

Estoy harto de esto, estoy harto de mi mismo, esas ganas, ese ímpetu, se han escondido, y yo no soy de jugar al escondite.

He buscado debajo de todas las piedras que me he encontrado en mi camino, he nadado mares y recorrido caminos, y ni lo he visto ni oído ni olido.

La vida es la eterna injusticia que todo ser humano debe aguantar como carga.

Debe controlar sus impulsos y sus sentimientos, y me he vuelto a dejar llevar.

He expresado todo lo que siento, tal y como es, y he extraído los colores de mi mundo.

Se ha vuelto monótono, en blanco y negro, sin nada interesantes.

Pasean por él miles de personas, pero nada vuelve a ser interesante.

He vivido dormido, en un sueño, y no he querido despertar…Me han anestesiado, así sin más, no puedo abrir los ojos…

Han llegado por detrás y me han puesto en la boca un paño con cloroformo, ni si quiera sé si ahora encaja todo…

No sé si estas frases tienen sentido, u orden, si estas insignificantes palabras merecen la pena…Ya nada lo hace…

Se ha ido...

Paz Armada

La historia ha dado un pequeño giro. He de confesar que no me lo esperaba, de hecho, me parece demasiado increíble a la par que irónico.

Hemos podido vivir de todo; nuestro propio período entreguerras, en el que mantengo que nos encontramos, nuestra guerra relámpago, en la que nos cogisteis algo de ventaja pero entonces llegaron los momentos de la verdad, nuestros enfrentamientos directos. Americanos e italianos os rendisteis a los pies de los zares y emperadores.

Parecíais arrepentidos, que la lección estaba aprendida, pero os duró poco. No sé si fue por mutuo acuerdo o independientemente pero volvisteis a atacar, una ‘’sorpresa’’.

Vuestro egoísmo y ambición os ha hecho perder gran parte de vuestros aliados, grandes sin duda, majestuosos como el león, y habéis buscado la perdición.

No entiendo, no sé si será que de nuevo os ha entrado el deseo de paz, de volver a ese tranquilo y, en teoría, amistoso mundo en el que vivíamos.

Puede ser, esa palabra que sonará a más de uno, estrategia.

La muestra de capacidad, de inteligencia, los pequeños movimientos que nos acercan a nuestro objetivo.

Voy a subir mi ego, ¿va? ¡Os he calado! Conmigo nunca funcionó, seré joven, pero los alemanes somos los mejores estrategas.

Creo que habéis captado el mensaje y ahora queréis… ¿Paz?

Yo lo llamaría Paz Armada, sí, ese período sin enfrentamientos en el que todos nos mantenemos en nuestro sitio, claro que preparándonos para el enfrentamiento mayor.

Vuestro pequeño cuento narra un mundo tranquilo, en fin, la paz, pero vuestra hipocresía os gana.

¿Cómo queréis paz si sois vosotros quienes atacáis?

Aquí el Káiser acepta la ‘’Paz’’ pero he de escuchar al emperador, al zar y a mi león inglés.

Yo también ofrezco la paz, habéis tirado el dado y habéis movido ficha, me gusta este pequeño juego de provocaciones.

Es cierto, tenéis más cosas que ganar que perder, pero nosotros no perderemos nada, porque existe una cosa que nos une, eso que habéis despreciado, se llama amistad.

Acepto la Paz y la firmo aquí.

Pero no descansaré hasta que en lo alto del Empire State y en el Castillo de Sant Angelo ondee la bandera blanca.

Estrategia II

Siento volver a utilizar esta palabra, me llamarás pesado, cansino, bueno, tu me llamas de tantas formas que ya no sé cual creerme…

Para mí como ya digo en mis innumerables metáforas, me encanta ver cada una de las estrategias que cada persona utiliza, como cogen papel y pluma y escriben su historia.

Pero tú eres un narrador peculiar, primero pediste colaboración, me hiciste partícipe de tu historia, quisiste que la escribiésemos juntos, pero eso sí, solo la tuya. Después llegó uno de los momentos más irónicos de mi vida, después de haberte ‘’ayudado’’ quisiste hacerme un personaje más, subordinarme a ti, seguir tu guión como muchos parecían hacer, pero en todo historia siempre tiene que haber un malo, y creo que en la tuya soy yo, aunque nunca has querido admitirlo abiertamente.

Como he dicho tantas veces, nos encontramos en un período entreguerras, y si echamos una mirada hacia atrás, independientemente de las victorias y derrotas pasadas, creo que voy ganando. Tanto tú, como tu único aliado miráis hacia atrás, y pensáis ambos ‘’esto molaba’’, aunque tú no lo reconozcas abiertamente.

De nuevo sale la palabra mágica, estrategia, me gusta tu estrategia, juegas al escondite, utilizas armas invisibles creyendo que nadie se dará cuenta de que eres tú quien las dispara. Sigues haciendo daño, y fingiendo que no te das cuenta, pero siempre estás ahí preguntando; ’’ ¿te pasa algo?’’, eres precavido y eso me gusta, pero a la vez me da pena, un día quisiste subordinarme a ti, pero sin darte cuenta, esta vez tienes tanto miedo que te estás subordinando tú a mi, no miedo de lo que yo pueda hacer ni miedo de que te asuste, pero temes mi reacción porque por muy duro que te veas por dentro, sabes que tienes más cosas que perder que yo, incluso tienes más cosas que perder que de ganar. No es una amenaza, tampoco un ataque de creidez o egocentrismo, pero creo que no ha habido Guerra porque yo no he querido…

Soy prudente en pocos aspectos y en esto lo seré, según la metáfora, seguiré, sí, esa gran estrategia que mis antepasados utilizaron, la de Otto Von Bismarck, provocar, provocar y provocar, pero jamás declarar la Guerra, y tengo un gran maestro para la provocación.

No voy a empezar esta vez yo, porque luego me llevaré las culpas aunque todo se solucione. Tú dices que no quieres empezar, pero no lo demuestras.

Yo no voy a cambiar, y tú y tampoco, así que…Habrá Guerra.

MA-DU-REZ

Creo que sí, todos cambiamos, todos maduramos, bueno, esto último nunca es seguro. La madurez de muchos es un tanto cuestionable.

La vida es muy larga, nací una Nochebuena, el 24 de Diciembre de 1995, exactamente a las 12:00 a.m.

Un día como hoy, 27 de Noviembre, mi mejor amiga hace con su novio 14 meses, y yo tengo 15 años. No puedo poner a multiplicar los 365 días del año por 15 años que tengo ni sumarle después un día más por cada año bisiesto.

Lo que si tengo claro es que he cambiado y mucho.

He crecido, he engordado, y me lo han restregado, he hecho amigos y he perdido otros, bueno no los he perdido, me he alejado de ellos.

Tengo cerca de mis amigos y aún más cerca de mis enemigos, y esto sé que abrirá sospechas. Mi color favorito es el azul, aunque a veces me gusta el rojo, pero nunca los combino. Mi película favorita, sin duda, es el Rey León.

He dejado huella en las vidas de bastante gente, en muchos buena pero en otros mala, pero creo que lo primero supera a lo segundo afortunadamente.

Tengo un amor interminable en mi vida, tengo un modelo de conducta, se llama José Mourinho, y al igual que a él, me encanta tener enemigos, ¿por qué?. Pues por la simple razón de saber que han pensado en mi, para odiarme, sí, pero he cruzado su mente de lado a lado. He visto a mi equipo ganar, empatar y perder, ganar Ligas, Copas y Copas de Europa. Creo que de mí destaca la chispa, esa infantilidad que tantas malas pasadas me ha jugado, pero que me encanta.

He librado guerras y batallas, y he perdido y he ganado.

He estado en el bosque, pero fuera de él he visto brujas y zorras, y sirenas fuera del mar también…

Mi animal favorito es el león, y mi mejor amigo es el gato con zapatillas de deporte, otro felino muy singular. Mi mejor amiga es un pez, concretamente un barbo y nada por todos lados y nadie puede ganarle ni quitarle esa sonrisa que le caracteriza.

Creo que mi vida no la puedo resumir en estas breves líneas porque han pasado demasiadas cosas, a diferencia de otras que viven del pasado porque no saben que hacer en el presente.

Nunca he pedido a nadie que cambie y menos por mí, creo que nadie debe cambiar por una persona y mucho menos por ese ínfimo momento de felicidad que te da el amor.

Pero claro…eso es cuestión de aprovechar cada momento de tu vida como si fuese el último, pero está visto que algunos quieren que su vida sea breve y solitaria.

En todo hay de todo.

Pero es caso de madurez…

Irónico

¡Qué irónico! Me recordáis a Indiana Jones, pero el si conseguía su propósito.

Es como ese niño que lleva jugando días y días con ese juguete hasta el día en el que se cansa de él, y lo guarda en ese pequeño baúl. Pero llega un día en que ese niño quiere, necesita ese juguete para poder disfrutar, pero cuando lo saca de la caja, ya está roto.

Me sorprendéis, creo que algún día, muy lejano, he llegado a admiraros, pero ahora me dais pena. Hubo una pequeña Guerra, demasiados países involucrados para que al fin y al cabo el enfrentamiento solo fuese entre dos de ellos.

Todo el mundo quería ser protagonista, lanza un ataque, una ofensiva que les hiciese triunfadores, llamar la atención, querían ganar.

Pocos nombres caben a destacar de ahí, Italia, Japón, EE. UU y como no, Alemania.

Parecíamos completos desconocidos era una pelea de niños en el patio del recreo, era un desfile de máscaras, todos poníamos buena cara pero sabíamos que el odio era inevitable, pero parecía que aprendíamos a vivir con ello, que nos acostumbramos…Vosotros no.

Sería el egoísmo, ese mismo odio, cualquier razón, pero no podíais soportar que las nuevas potencias os quitasen el protagonismo que tanto os había costado ganaros.

He de admitir, como buen estratega, que esa fue la mayor derrota  que he llegado a tener, y es vergonzosa ya que los enemigos fueron los más insignificantes.

Y entramos en ese pequeño período de entreguerras, más bien, esa Guerra Fría… ¡Ay!...Ese fue vuestro fallo. Como he dicho antes, estamos en ese período entreguerras, con pocos enfrentamientos directos, pero todos estos dichosos períodos se acaban.

Vuelven a sonar los tambores a lo lejos, lo estáis deseando, en vuestra retina aún está el recuerdo de esa victoria que tanto dolió aquí, en el Viejo Continente y parte de Asia

De nuevo queréis ser vosotros quienes deis el primer golpe, y creéis que volveréis a ganar…Pero antes de todo, hay que mirar a izquierda y derecha, y ver a quien tienes a tu lado, ver quien puede ser un aliado…os cuento…EE. UU, Italia…Se acabó.

Miremos al otro lado… Alemania, Japón, Polonia, Rusia, Inglaterra, Bosnia-Hezergovina, España…Creo que ya tenemos un punto más.

Si os paráis a leer detenidamente los nombres, recordaréis que algunos de ellos estaban de vuestro lado, o incluso se declararon neutrales ante esto, pero a las personas se le demuestran las cosas a base de respeto, cariño, haciéndoles felices, a base de amor, sí, eso que fingís continuamente pensando que fingiendo se hará realidad.

Estáis buscando aliados, aquellos que perdisteis y otros que nunca lo fueron…

Pero de nuevo, mi amado Capitán Garfio, el general de las tropas alemanas, os define…

Viejo, solo, acabado...

Nuestro

Ha dado tiempo. Esto es dar vueltas sobre nosotros mismos. Digamos que cada uno vuelve a mirar por sus intereses, cosa con la que estoy totalmente de acuerdo pero existen unas cosas llamadas fronteras.

La hipocresía de nuevo lleva a la debacle del Viejo Continente, y claro está que los americanos han de inmiscuirse.

Rara vez el fascismo se unió al comunismo, rara vez ilustrados y absolutistas han estado de acuerdo…De nuevo el victimismo, el teatro, el bochorno, la bella Italia intenta hacer de las suyas, ya está en ruinas pero parece que su falsedad le hace resurgir de las cenizas aun sabiendo que volverá a caer.

Otra vez la inquietud y el inoportunio de EEUU le llevan a sumarse a la causa italiana, a ganarse los pocos enemigos que le faltaban por ganar.

El imperio del Sol naciente, mi querido Japón, tiene más ganas de Guerra que nadie, pero debe mantener la falsa paz para no perder la compostura que le caracteriza.

Muy equivocados estaban los que alguna vez pensaron que la gran Rusia se dividiría, sin duda una de las naciones más fuertes que mis humildes ojos han llegado a ver, les sujetan unos lazos, una unión que supera los límites de la comprensión…

De risa, repito, de risa es la opinión de aquellos que llegaron a afirmar que la gran Alemania estaba perdida, sin ningún norte ni meta.

Demasiados ejércitos, alemanes y extranjeros, he visto desfilar por las calles de Berlín. Pocos han durado. Ni si quiera esos pequeños marxistas han logrado rebelarse y derrocar su propio IV Reich.

Su orgullo y egocentrismo le pierde, cree que puede gobernar sola pero de siempre ha tenido una gran debilidad, su territorio talismán, la amada Polonia.

Pero ha sucedido lo que todo alemán y me trevo a generalizar, lo que todo europeo ha llegado a soñar, lo que el Kaiser tanto ansiaba, ha llegado el gran aliado…

Por fin ha despertado el León Inglés. H abierto los ojos, ha roto negociaciones y ha cambiado las tornas, ha visto la realidad tal y como es.

Westminster ha entrado en razón.

Entró de nuevo por Normandía, pero Luis XVII le echó de Versalles de una patada.

Acudió por ayuda al Oeste, pero el rechazo le hizo rebotar al Este, donde es bien recibido. Esta vez no funcionarán dos bombas nucleares.

Europa está revolucionada, los anarquistas vuelven a ser desterrados y continuan evocando la Comuna de París, pero Francia sabe que Europa ya no es como antes, que esta no es su Guerra.

En esta no nos engañarán, sabemos su punto débil, y no, no es Italia que continua en ruinas, llorando y añorando al gran Benito, mientras España, con su chispa, se ríe aun queriendo que esta recapacite.

Suenan los tambores de Guerra, pero se oyen lejos, al otro lado del charco; Europa es nuestra.

El Viejo Continente siempre ha sido nuestro...

Viejo, solo, acabado

Mira, atentamente, a un lado y a otro mi querido Duce, estás rodeado, tienes un ejército muy numeroso, eres persa y yo espartano, me crié entre sufrimiento y de él he aprendido, a ti siempre te han consentido y vives del capricho.

Rodeado, poderoso, crecido, en la cima, con un ego imparable, ¿así te sientes verdad?

Puedo ver tu sonrisa desde aquí abajo, y no te fijarás pero en mi rostro reina una mueca de burla, de impasividad, y una sensación de pena.

Levantas tu rifle, o tu espada, no logro ver tu arma, orgulloso miras a los lados y alzas la voz, tienes a un montón de personas pendientes de ti, eres el centro de atención, están a tus órdenes. Siento bajarte de las nubes, estas rodeado de mercenarios, sí, personas que te apoyan por su propio beneficio, solo se salvan unos cuantos…Unos pocos, demasiado pocos, que antes superaban a esos mercenarios, antes llenaban tu vida pero los desterraste.

Tus ataques de caprichos, lujurias, envidia tal vez, te han hecho abrir demasiados frentes en la batalla, y sí, de nuevo vuelvo, incansable y repetitivo, lo hemos querido evitar, pero hay guerra.

Cada uno elige el camino, cada uno juega sus cartas, no somos narradores pero al igual que en los libros de Unamuno, somos personajes demasiado fuertes como para seguir un guión estipulado, podemos rebelarnos y empezar a escribir una parte de nuestra pequeña historia. Podemos elegir nuestro papel en nuestra historia, pero no el la de los demás y creo que el papel que me has dado en la tuya, me viene perfecto para mi comportamiento, tan hipócrita.

Pero hay una gran diferencia entre nuestras historias, en la mía, la amistad está por encima del amor, la amistad es capaz de derribar ejércitos y de unir a naciones que acaban de salir de una brutal guerra.

La amistad es la que divide nuestra alma, porque no se puede concentrar todo en una persona, estaríamos perdidos, y tú no sabes ya por donde tienes que nadar…

Todos son conocedores de mi afición por esos personajes antagonistas de una película, esos tan especiales hechos para perder y que aunque empiecen bien, todos sabemos su final…De entre ellos destaca uno que dijo una vez…

Viejo, solo, acabado…

Yo cambiaré tu historia...

Bye bye máscara

Hasta los santos cojones, estoy harto de que todas las noches tenga que desenganchar las putas gomas de la máscara con el pelo.

Una máscara que llevo obligado, bueno, mejor dicho, llevaba.

Será una revolución, creo que es el simple hecho de haberme unido, de hacerme uno con el mayor enemigo que he tenido a lo largo de varios años, haberme enamorado, creo que me ha devuelto la vida.

Porque hay muchas personas que dicen ‘’Te quiero’’, ‘’Te amo’’, pero sé que muy pocas lo dicen e verdad, y esas pocas son correspondida.

Muchos me lo han dicho, me echan de menos, esa manera tan impulsiva de reaccionar, esas frases sin sentido que soltaba en mitad de una conversación en la que ni si quiera debía inmiscuirme.

Es una nueva sensación, un cosquilleo, un sentimiento, joder, se me acaban los nombres, no sinónimos, sino nombres porque sinceramente no sé como llamarlo.

Son tantas veces las que he tropezado con la misma piedra, incluso con piedras demasiado parecidas. Demasiadas veces he perdido los tres puntos en el minuto 93, esta vez no quiero escándalos, no será en Stampford Bridge, será en el Bernabéu.

Ese dichoso cosquilleo que sube de pies a cabeza, no me lo explico, son esas ganas de provocar, de decirte a la cara: ‘’Eh¡ tú, gilipollas, si no vales un puto duro, no rebajes el valor de los demás porque nadie será en la vida una mierda como tú’’.

Dejar de esbozar esa sonrisita falsa que me provoca cada vez que llegan, dar un abrazo falso, dar la mano a quien en realidad quiero darle un puño.

Porque ya tuve un pequeño ataque de sinceridad delante de la persona que mejor me conoce en el mundo e incluso él se sorprendió de mis palabras…

Será que después de todo, sigo multiplicándolo todo por 15, el año que viene 16 y así hasta morir…

Será que me he hartado de vuestras putas caras, que ha vuelto la mejor versión de mi…

Pero he de daros las gracias, dado que si no fueseis tan gilipollas, nunca habría vuelto…

Dios, que agusto...

Nadie dijo que la vida fuese un cuento de hadas, nadie quiso ser un gato con botas, pero al igual que él tú si has pretendido fingir, y recuerda que aunque a mona se vista de seda, mona se queda.

Ha llegado un momento en el que has creído tenerlo todo, que te ha costado si señor y tienes tu mérito, pero ¿crees que merece la pena estar con una persona que apenas te aprecia y haber dejado a las pocas que han llegado a quererte por el camino?

Has sufrido y te ha costado, y a los héroes se le reconoce, pero tu concepto esta distorsionado, héroe es el que hace el bien e hija, eres peor que la reina de corazones de Alicia en el país de las maravillas.

Solo has creído que el amor se concentra en una persona, y has concentrado tu todo en él, y para variar, no ha sido lo que esperabas.

Tengo una capacidad metafórica demasiado buena para gastarla en una persona demasiado hundida en mierda como para sacarla.

Y es que la vida, ese vacío que tienes dentro no lo llena el amor, lo llenan los amigos y que sepas querida que pocos te quedan.

Que sepas que uno a uno se han parado en el camino o incluso en muchos casos, tu los has echado a patadas, bueno, a coletadas dado que estas hecha una sirenita.

Creo que este ataque es demasiado gratuito pero me da igual, y te lo digo desde el cariño que te tiene un cabronazo que no para de pensar como joder la vida a los demás según algunos…

No puedo decirte que vives en un universo paralelo donde las cosas son demasiado diferentes a la realidad, he de decirte que vives en eso que niegas, sí, en un cuento de hadas donde te has casado, humilde princesa, con Igor.

Tú pides opiniones, y puedes leerlas entre líneas pero está claro que trabajas en la sombra, tecleando, bueno, en la sombra lo digo, ya que estamos, porque solo sabes ir detrás de él, es decir su sombra, aunque tu la superas dado que vas hasta cuando no hay luz.

Creo que no te mereces lo que estoy escribiendo, o tal vez sí, simplemente te doy mi opinión como muchas veces das tú la tuya y creeme, después de lo que has hecho, te has ganado a pulso que a nadie le importe…

Sonará hipócrita, y me encanta, pero estás a tiempo de enmendar bastantes errores antes de verte más sola de lo que estás, es decir, realmente como te mereces estar…

Sento come un fallimento...

-¿Qué haces?

- Lo de siempre ¿ por?
- Ya estás fingiendo otra vez, has vuelto a descolgar la máscara, a sacarla de ese maldito armario que nunca cierras con llave…
- Es mi manera de ser, no puedo evitarlo, no puedo quitármela, y créeme que tengo muchísimas ganas de hacerlo…
- ¿Tienes ganas?
- Claro
-¿Y memoria?
- ¿A qué viene eso?
-¿Tienes o no?
-Sí…
-Entonces, ¿recuerdas esas tardes en las que no parábamos de hablar, esas risas que nos salían solas y acabábamos llorando de ellas, esos momentos de silencio o de tensión en los que nos bastaba con mirarnos para esbozar esa sonrisa que nos alegraba el alma?
-Claro que me acuerdo…
-¿Llevabas alguna máscara?
-No…
-¿Y te la pones ahora?
-Sí, me la pongo…¿Recuerdas acaso tú, los momentos en que te han jodido la vida?
-No ,no me han jodido la vida…
-Nunca te han jodido la vida, nunca has merecido que te la jodieran, pero hay personas que si nos merecemos que nos lo hagan, que sí nos lo han hecho…
-Tú no lo mereces…
-Si no lo mereciese, creo que nadie me hubiese roto puño a puño, golpe a golpe, nadie habría destrozado la sonrisa que lucía orgulloso como bien decías tu antes, si no lo mereciese, daría la cara de nuevo…
-No das la cara porque no quieres…
-No doy la cara porque no puedo despegarme las malditas gomas de esta máscara, que ya forma parte de mi…
-¿Y por ella?,¿lo harías por ella?
-Por ella…no puedo, no puedo hacerlo, no puedo dejar que vea en lo que me he convertido, todo lo que he provocado…
-Pero…¿cada vez que sales por esa puerta, como te sientes?

-Siento que soy un error...

-¿Qué dices?,¿por qué?

-Porque ésta noche me siento como un astronauta
Enviando SOS desde esta pequeña caja.Y perdí toda señal cuando me alcé.Ahora estoy atascado aquí y el mundo se olvidó.Por favor, puedo bajar, porque estoy cansado de dar vueltas y más vueltas a la deriva.Por favor, ¿puedo bajar?...