jueves, 29 de diciembre de 2011

Ni se te ocurra irte

Es una de esas noches extrañas en Nunca Jamás, me parece que demasiado extraña.
Los pájaros no revolotean, no se oyen esos horribles gritos de esos indeseables niños perdidos que no tienen nada que hacer. Tampoco se oye esa horrible y asquerosa voz, sí, hablo de él, de ese niño engreído que me corto la mano y se la dio a comer al cocodrilo.
Sólo destaca en el cielo una luna llena, pero es una luna roja…Luna de sangre…
Todavía puedo recordar cuando fue la última luna de sangre, para unos bendita, pero para otros…maldita noche, y creo que me incluiría en el último escaño.
Realmente fue una noche como otra cualquiera, la única diferencia fue la dichosa luna, pero tampoco le dí ninguna importancia hasta que su cuchillo, sí, el de Peter Pan, atravesó mi brazo y ví sobrevolar mi mano izquierda hasta el agua, pero me quedé embobado mirando la luna, mientras él se reía, huía y el cocodrilo masticaba mi mano.
Creo que en ese instante me volví loco de verdad. Cada noche de luna llena me quedo observando la luna, pero nada de nada, pero esta vez, es roja, es luna de sangre otra vez, debo mirar, pero hay algo que me dice que no…
La miro fijamente, se dilatan mis pupilas y sólo oigo una voz… ‘’No eres así’’
Sé perfectamente que esta noche el Karma ha hecho de las suyas, y he escuchado a la luna, pero de refilón, a mi izquierda hay algo que brilla demasiado…Es mi ‘’mano’’ izquierda, sí, entrecomillado, dado que carezco de ella, lo que brilla es mi garfio, el que me da nombre, ese nombre del que con orgullo presumo, Capitán Garfio.
Pero más que brillar el garfio, brilla el rencor, de la última luna de sangre.
Sé que Peter esta mal, peor que mal, creo que esta sería mi ocasión para hundirle, mi ocasión para hacerme con Nunca Jamás, para regodearme, pero sólo se me viene a la cabeza lo que la luna me dijo ‘’No eres así’’.
No soy así, cada vez que puedo, pase lo que pase, saco mi loca sonrisa, me puede mi orgullo pero no quiero ver a nadie pasarlo mal.
Es mejor que eche mano de los recuerdos buenos, esos en los que no pasaba nada malo, en los que todo eran sonrisas y no lágrimas a menos que fuesen de alegría, creo que eso puede ganar a una sola noche, en la que sí, perdí la mano, pero ganará…
Miro de nuevo la luna…Ya no es roja…Es una luna llena normal y corriente…
Me acerco a la guarida, ¿qué hace Peter Pan en el suelo sangrando?
Esta loco, demasiado loco, es como yo, y si yo vivo, él se merece vivir.
¿Crees que esto tendría emoción?
¿De verdad crees que Nunca Jamás podría seguir adelante sin alguno de los dos?
¿A quién ataco? ¿A quien atacas?


Anda, ven al barco...Y enséñame a volar.

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