martes, 17 de enero de 2012

It slips through my fingers

Vienes con el aire, con el calor, el frío, las lluvias, y caes poco a poco, gota a gota, y cuando llenas el vaso, lo caes y te derramas.
Pasas con tus aires de grandeza, de pureza, similar a los reyes de antaño.
Dejas una huella imborrable cuando te lo propones, eres capaz de aumentar la distancia entre el 1 y el 2 tú solito.
Cuando quieres eres bueno, y borras esas huellas de daño y malas intenciones que dejan en los demás las personas menos indicadas para presumir de sus gestas.
Eres un golfo de la vida, un nómada, no paras, te envidio. De un lado a otro, de otro a un lado, vas y vuelves, vuelves y vas, al derecho y al revés y después primero el revés y entonces el derecho.
Me gusta tu corbata, la que llevas con tu chaqueta negra y tus pantalones de pana, aunque a veces lleves bombachos.
Pareces el gato, y yo el perro, pero no te quiero hacer daño, aún así huyes y te escapas de entre mis dedos.
No puedo hacer nada para detenerte porque eso me cambiaría a mí, y a todos los que existimos, lean o no esto, pero siempre me queda tu recuerdo.



Por cierto, ¿sabes que por fin me compré un reloj?

No hay comentarios:

Publicar un comentario